miércoles, 10 de diciembre de 2008

Sobre Alejandro Escovedo

Texano de nacimiento. Fue telonero de los Sex Pistols. Su sonido tiene ecos de punk, rock y country. Junto con su hermano Javier, fundó los True Belivers. Luego Alejandro prefirió andar en solitario y su hermano se unió a los Blues Travelers, también recomendables. Una enfermedad grave estuvo a punto de dejarlo fuera de circulación, pero al final se repuso y ha vuelto al camino. Su nuevo disco Real Animal, fue producido por Tony Visconti y es una auténtica maravilla. Por suerte, se puede conseguir en México, lástima que sea el único disponible por estos lares, como sea es de lo mejor que se ha grabado en los últimos años. Aquí los dejo con su actuación al lado de Bruce Springsteen, la canción es "Always a friend" y es del propio Escovedo.

he vuelto


Justo cuando el año está por terminar retomo el blog, y lo hago prometiéndo más constancia, algo que quienes me conocen saben que es un reto mayúsculo.

Acabo de ver la nueva película de Woody Allen: Vicky Cristina Barcelona. Me genera opiniones encontradas. Por principio la belleza de Scarlett Johansson y Penélope Cruz está aprueba de cualquier comentario. Segundo, Woody Allen no tiene término medio. Están quienes lo odian y lo aman. Su fila de devotos es grande. Cierto es que aprendió bien del maestro Igmar Bergman, y tanto aprendió que decidió satirizar la comedia humana, al saberse que no podría superar lo hecho por el director sueco. Cierto es también que tanto Match Point como Cassandra's dream, sus incursiones en la tragedia, me han parecido afortunadas por decir lo menos. Me gusta el modo en que se reinventó Woody Allen con ambos filmes.
Sin embargo, Vicky Cristina Barcelona, tiene algunas fallas demasiado elementales como errores de iluminación. Hay una escena donde Javier Bardem prende una lámpara y se enciende toda la habitación, por ejemplo. Respecto a la historia, es un enrredo interesante sobre la complejidad en las relacines de pareja. Lo que puede terminar en un melodrama, es llevado al nivel extremo de la sátira. Hay personajes forzados, pero al final el resultado lo justifica. Soy seguidor de Woody Allen y casi incondicional, como también lo soy de Scorsese, aunque parezca que ambos ya vieron pasar sus mejores tiempos.

miércoles, 6 de agosto de 2008

sobre la felicidad

Acabo de terminal "Dietario voluble", el nuevo libro de Enrique Vila-Matas y hay una cita que me da vueltas. Se trata de una frase del aforista Outil O'Toole: "He conocido la felicidad, pero no es lo que me ha hecho más feliz".

domingo, 3 de agosto de 2008

Al Lewis


Hace unos días vi el documental Goodbye, America (2006), del director español Sergio Oksman. El protagonista es Al Lewis, actor que he de reconocer, más allá de papel como "El abuelo" de la Familia Monster, no me decía nada. Es más tengo que reconocer que me entere de su nombre cuando vi el cartel de la película. Mi expectativa sobre la película era conocer la historia de alguien, que bien podría ser la metáfora perfecta de lo que los melomanos llaman "one hit wonder". Pero vaya sorpresa, Lewis fue en realidad, un activista de una sola pieza. Vivió el McCarthysmo. Más allá de su vida en Hollywood, Oksman se centra en el perfil político del actor. Los ochenata minutos del filme transcurren mientras lo maquillan antes de salir al escenario para hacer una escenificación más del vampiro que lo hizo famoso en la televisión. Una primera reflexión para rescatar es cuando confiesa no entender por qué a la gente le gusta ir a ver un espectáculo que les transmita miedo, "quizá porque nunca lo han sentido en verdad", dice este hombre que sabía lo que era estar en frente de batalla. Hacia el final, Lewis tenía un programa de radio crítico e irreverente, en México, sólo Marcelino Pereyó es capaz de hacer algo parecido. En resumen el documental no tiene desperdicio. Por lo demás no deja de llamarme la atención que lo haya filmado un español, quizá este sea el mejor homenaje que vio los peores momentos del siglo XX en los Estados Unidos -el crack económico, Vietnam, Corea, Kennedy, Nixon, el 11-S- y nunca bajó la guardia. El cine independiente norteamericano -porque el otro es imposible-, le debe un homenaje digno a Al Lewis.

viernes, 18 de julio de 2008

algo sobre Partitura para mujer muerta


Algo de Partitura para mujer muerta de Vicente Alfonso, publicado en Vértigo 383:

La obra de Vicente Alfonso indaga en torno del asesinato de una joven, pero el telón de fondo es la descomposición social. Si estábamos acostumbrados a que por más corrupción y muerte siempre llegaría un Marlowe, Carbalho o Montalbano a poner un poco de orden, ya no es así. Hoy el desencanto de la novela negra es tal que apenas hay espacio para la redención. Todavía hace unos meses leíamos el surgimiento del nuevo antihéroe policiaco en tierras culichis: el Zurdo Mendieta de Élmer Mendoza. Sin embargo, en la novela del Alfonso no hay espacio para este tipo de personajes.

sobre La noche del caníbal


Algo sobre "La noche del caníbal" de Luis Jorge Boone, publicado en Vértigo 382:

Laberintos circulares narra la paradoja de “el verdugo que siente tal compulsión por matar que termina decapitándose”. El inicio de Oblivion es en sí mismo un relato: “Se levantó de la cama en busca del último frasco de loción y, al encontrarlo vacío, supo que el aroma provenía de su memoria”. Una minificción hecha y derecha, el resto del cuento merece lectura, pero no consigue la contundencia de su inicio. La recta final la constituyen Telarañas, Mandrágula y La noche del caníbal. Con su peculiaridad, cada texto ronda los bordes de la locura y la realidad. El primero plantea la neurosis de quien espera día a día la muerte. El segundo camina sobre el sendero que traza el deseo. Del último habría que destacar su carácter rulfiano. Al interior y en los alrededores de una mina, el protagonista confronta su pasado con su presente, el mundo de los vivos con el de los muertos.

jueves, 3 de julio de 2008

sobre Jorge Harmodio

Aunque el libro no salió con esta portada, es la única disponible en Interntet -además me gusta más que la otra. Una lección más de que no todo está en la red.



Comentario en Vértigo 381:
"Doctor en lingüística informática, el escritor muestra una constante preocupación por la estructura y el lenguaje en las nuevas formas de contar. Las traslada de manera natural al papel impreso, sin que pierdan familiaridad con su contexto. Si anteriormente revisamos cómo Jaime Mesa en Rabia usaba al internet como marco de referencia, Harmodio lo hace desde dentro, es decir, como si el blog del protagonista fuera llevado tal cual a un libro. El valor del experimento se agradece, aunque el reto es mayúsculo. Es quizás en este punto donde radica la principal virtud de Musofobia. En pleno Siglo XXI el temor a los ratones no es sólo aversión a los pequeños animalitos grises, sino también al ratón de la computadora. La virtualidad como condicionante de vida.
Sin embargo, mantener una novela con forma de diario requiere que los personajes tengan una biografía lo suficientemente interesante como para mantener al lector enganchado. No es el caso de los protagonistas de Harmodio".

sobre guadalupe nettel



Comentario en Vértigo 380:
"El epígrafe de Mario Bellatin es preciso: “¿En qué consiste la belleza del monstruo? En su no darse cuenta”. Los relatos de Nettel se mueven en este terreno y de ahí la incomodidad. Su prosa se cierne como una puya que probablemente removerá alguna fibra sólo en el lector generoso: aquel que se entrega sin cortapisas a un texto atrevido que nos habla de tú a tú.
En la mayoría de los relatos, Guadalupe Nettel respeta la estructura clásica del cuento, si acaso al final se atreve a jugar un poco con las formas, lástima que el resultado no sea el más afortunado. Aún así, encontrar dos joyas en seis intentos no está nada mal. La escritora se muestra como una de las narradoras más interesantes de su generación".

sobre Rabia de Jaime Mesa



Comentario en Vértigo 379:

"La pluma de Jaime Mesa se decanta por retomar canales narrativos clásicos, aunque sin llegar a una prosa lineal. El énfasis del autor poblano reposa en la complejidad sicológica de los personajes. De hecho, hay que poner atención en la relación de Foster con su madre. Hasta aquí la novela resulta interesante, lástima de algunos descuidos estilísticos (por ejemplo: “Le digo que ha dicho que Susana no quiere a un hombre”) que lastiman la obra. Por lo demás, Mesa, que anteriormente había publicado relatos para distintos títulos de editorial Ficticia, llama la atención por la aproximación que realiza sobre la soledad y las relaciones contemporáneas".

sobre Gonzalo Soltero



Comentario Vértigo 377:
"Soltero sorprende con el relato porque conjuga elementos de ciencia ficción y el género negro, con una estilística ambiciosa —a veces demasiado ambiciosa—, y aun así no puedo dejar de destacar la narración de los episodios de acción (...)En su conjunto, Sus ojos son fuego es una novela sobre la violencia y sus efectos. La visión de su autor es sin duda desoladora, pero no le falta razón. La locura de sus personajes es la locura que de alguna manera vivimos cada día".

sobre el libro de Emiliano Monge



Extracto en Vértigo 369:

"El ambicioso ejercicio de Emiliano Monge se resuelve bien. No negaré que llegar hasta el final no es fácil. Los cuentos se exceden en la descripción y en este sentido las alusiones a los animales e insectos son una constante que se vuelve predecible, lo que en consecuencia se traduce en una historia diluida. Monge exige paciencia: si el lector se la otorga —insisto, no es sencillo— descubrirá una obra que nos habla de cómo llenamos nuestra vida de cosas poco sustanciosas y muchas veces no hacemos más que enumerar recuerdos o imágenes —es decir, describir— hasta ahogarnos en una espiral insalvable".

grandes hits



Un fragmento de mi reseña publicada en Vértigo 378

"En la introducción, Tryno Maldonado destaca, más que vasos comunicantes, las diferencias que hacen de esta una generación diversa. Habla sobre la ausencia de un gran tema como hilo conductor; de las diferentes maneras de ver a México —en este sentido, quien esto escribe no puede dejar de recomendar los relatos de Solares y Yépez—, y de la presencia del internet en sus universos narrativos. Sin embargo, un dato que no menciona el editor es el sentido estilístico que sostiene la prosa de varios autores, como Miklos y Guadalupe Nettel —a esta última hay que seguirla con cuidado. Sobre el resto habría que destacar la madurez presentada por Chimal, García González y Bernardo Fernández. Ortuño sobresale por su ironía y buen pulso".

sweet setentas



Desde hace unas semanas me propuse dedicar mis horas de lecturas a los escritores mexicanos nacidos en los setenta. Llevo poco más de un mes dedicando mis columnas en Vértigo, a estos autores: Emiliano Monge, Gonzalo Soltero, Guadalupe Nettel, Jaime Mesa, Jorge Harmodio y por su puesto, la antología Grandes Éxitos de Tryno Maldonado. Anteriormente he publicado comentarios sobre libros de Vivian Abenshushan, Bernardo Esquinca, Rafael Lemus, David Miklos y Heriberto Yepez. A mi juicio son pocos los en verdad valen la pena. Poco a poco, iré reproduciendo aquí algunos de mis comentarios. Por cierto, la "polemiquita" con este tema que se ha visto y leído en mino foros de intelectualoides, da pena ajena.

domingo, 29 de junio de 2008

jueves, 26 de junio de 2008

Sobre Jaime López


Fragmentos de la entrevista que le hice a Jaime López y que publiqué en la revista Vértigo 377:


"Yo no soy de la idea de “no soy de aquí ni soy de allá”. Yo soy de aquí y soy de allá. Es algo común en todo país, cambian los sonsonetes y hay matices diferentes, pero es común el dinamismo y el humor del lenguaje. Esos son los verdaderos símbolos de identidad, más que el himno o la bandera. La lengua es la raza. A veces no me gusta hablar de razas, porque cuando lo haces evocas el principio del racismo, pero si tuviera que hablar en estos términos la encontraría en la lengua".


"Una canción tiene por lo menos diez posibilidades y tienes que elegir una, más por responsabilidad que por vanidad. La canción se mueve sola y te lleva a revolcarte de distinta manera. Por ejemplo, Sácalo, todavía me sigue motivando; sin embargo, no te voy a negar que de repente olvido la letra. El proceso de composición es, como dicen los antiguos, dialéctico: composición, descomposición, composición, la cosa es no quedarse en un solo punto. Recuerdo a Muddy Waters, quisiera llegar a su edad cantando la misma canción y siempre con esa fuerza. Siempre lo veías con Hoochie Coochie Man, pero con fuerza y de distinta manera. Ahí tienes el mejor ejemplo de que con una canción tienes".


"Nunca pensé en mis delirios paternales, era de anticonceptivos, pero a los 35 años tuve una hija y descubrí que realmente sí tenía un sentimiento paternal. Fui responsable de eso, mi segunda hija me hizo más consciente, hasta de ser ahorrativo sin llegar a la codez. Después de todo, empiezas a ahorrar para despilfarrar mejor. Cuando eres responsable lo haces para ser un buen irresponsable".


"Como dijera un buen amigo, no quisiera ser símbolo sexual sino objeto sexual. Y yo soy un ojete sexual, supongo que me he ganado esa fama (risas). Todo se revierte. Es la segunda Ley de Newton, toda acción corresponde a una reacción inversamente proporcional a la fuerza que lo provoca".


"Esto a final de cuentas es la larga carrera de la depresión, uno aprende a salir más rápido, pero esa sensación siempre va a estar, como el dinosaurio de Monterroso, y cuando despertó la depresión todavía estaba ahí. Aún así, son más alegrías y sobre todo placer. Quizá sea la primera vez que lo digo, pero para mí es más importante que la lucha por el poder, la lucha por el placer. Más que la imaginación al poder, creo en el poder de la imaginación. Parecen juegos de palabras, pero para mí realmente son fórmulas matemáticas que aplicadas en la vida te dan muchas satisfacciones."

lunes, 23 de junio de 2008

martes, 10 de junio de 2008

Fito & Calamaro

Fito & Calamaro

Me sorprendió encontrar en las que las cada vez más limitadas tiendas de discos de Carlos Slim, encontrar el disco de la gira que el año pasado realizaron Andrés Calamaro y Fito & los Fitipaldis por España y Argentino. Pocas veces hemos visto al viejo Salmón, tan acoplado con otro artista, quizá sólo con Ariel Roth alcanzó la química que se nota con Fito Carbrales, un songwriter, como dicen los gringos de altísimos vuelos, pese a que en México siempre pop no ha tenido la acogida que se merece. Lástima que la chilanga banda no pudimos presenciar ese tour de force. Nos conformamos con contar los días para que Calamaro venga por primera vez a nuestra ciudad. Que me perdonen los seguidores de Sabina y Serrat, sin duda maestrísimos de la lírica en castellano. Pero la dupla Calamaro & Fito, los superó rock and rollo.

jueves, 5 de junio de 2008


No deja ser curioso que entre los críticos y especialistas en rock que escriben, se hable de Willie Nile como un nuevo songwriter. Resulta que este hombre tiene casi sesenta años y graba discos desde 1980. Cierto es que no es muy prolífico, pero de eso a decir que es un jovencito tampoco. Como sea, esto no demerita en lo más mínimo su talento. Lou Reed se ha referido a él como un gran artista, lo mismo ha hecho Bruce Springsteen y Bono -aunque este último cada vez sea menos confiable como referencia. Claro que es peor que no lo conozcan. Nile tiene amargura y fuerza, aún cuando a veces suena demasiado a Dylan tiene una actitud punk que lo distingue. No es tan épico como Springsteen, ni tan literario como Reed y tampoco tan irónico como Warren Zevon, pero es indudable que merece ser más conocido. Por supuesto que en México sus discos son iconseguibles, pero si tienen modo Amazon resuelve el problema para conseguir esa pequeña maravilla llamada "Streets of New York".

miércoles, 4 de junio de 2008

Con ustedes Juan Gelman

La pretensión

El disparate de la tristeza y
sus animales que
huergan por todos lados
son más verdaderos que yo.
Estas palabras
son más verdaderas que yo.
Son materia y no tiempo,
en sus entrañas hay
una piedra que nunca se acaba.
Los hijos de los hombres se creen
que mojarlas con vino
les quitará conciencia, fuego.
Hay palabras que esperan y nadie las toma.
Solas ahí en silencio florido.

(Mundar. Editorial Era).

lunes, 5 de mayo de 2008

¿qué es la izquierda?

Ayer, en una comida con familiares y amigos se dio una polémica sobre la izquierda. Me parece absurdo que el argumento de los "vanguardistas izquierdosos", resuman una ideología a un personaje como López Obrador. Ahora resulta que en México, sino estas con AMLO no eres una persona de izquierda y sí un simpatizante de Felipe Calderón. Qué patético. En fin así es el nivel del discurso de nuestros "zurdos progresistas". Recuerdo a Octavio Paz, cuando señalaba que era triste como la izquierda, cuyo origen era la crítica, había perdido esa capacidad hacia si misma.

jueves, 10 de abril de 2008

algo sobre élmer mendoza

Élmer Mendoza. Balas de plata. Tusquets. 254 pp.

¿Será coincidencia que las iniciales de Élmer Mendoza (Culiacán, 1949) sean las mismas que las del policía Edgar “El Zurdo” Mendieta? En todo personaje siempre hay algo del autor y seguro esta no es la excepción. Hay a quienes entretiene descubrir las proyecciones personales a través de la ficción, el juego se vale. Sin embargo, tampoco creo que Mendieta sea un alter ego de Mendoza. Es cierto que Balas de plata, flamante y merecida ganadora de la segunda edición del Premio Tusquets de Novela, retoma al personaje del protagonista –la primera vez fue en un cuento, que publicamos en mi era en Playboy-, pero quizá habría que esperar un poco más para comprobar si en verdad existe una relación simbiótica entre ambos. Al contrario de esto, donde el escritor sinaloense sí consigue una verdadera literatura reflejo, es al momento de construir atmósferas y situaciones que describan el modo en que opera el poder en México. Para descubrir el asesinato de Bruno Canizales nada mejor que acudir al género negro, tal vez algún escritor con el ego enorme, se habría decantado por realizar una novela más de corte político. No obstante, Élmer Mendoza, que anteriormente había mostrado músculo en El asesino solitario, sabe que difícilmente hay un género que mejor refleje el lado oscuro de la sociedad y por lo mismo del ser humano que el policiaco. Atrás de la muerte de Bruno hay un entramado complejo, digno de un país como México, donde cualquiera puede ser culpable: el narcotráfico, el padre con aspiraciones políticas, la pretendiente, el novio, etc. La novela es por demás creíble, Élmer Mendoza conoce perfectamente los escenarios del noroeste. Sus virtudes y sus infiernos, sus diálogos y sus señas. Pero hay más, el narrador norteño que hace apenas un puñado de años deslumbrara a Arturo Pérez Reverte, sabe –como casi cualquier culichi- cómo opera el narco. Y es en este punto donde Mendoza consigue uno de sus grandes aciertos, sin demagogia ni doble moral, presenta una novela con todos los elementos del México contemporáneo, el país de la simulación.
Del resto, no hay más que ubicarnos. Edgar “El Zurdo” Mendieta pertenece a la tradición de policías latinos –y aquí por supuesto incluimos a los españoles e italianos-: personajes no tan duros como los sajones, con una cultura relativamente superior a la que podríamos imaginar, perdedoros en el amor y en la vida misma, etc. Y es que sí Élmer Mendoza nos convence de que un maestro de literatura se puede convertir en policía, casi casi nos puede convencer de cualquier cosa. No hay duda que estamos ante una clásica novela negra quizá en el mismo nivel que El complot mongol o Cuatro manos, mas aquí no para la cosa. Si todavía existe alguien que considera que este género carezca de riesgos estilísticos, aquí topará con pared. Basta mirar los diálogos a renglón seguido para entender que tras la historia hay una tramoya estética ambiciosa y poco complaciente. Todo para llegar a dos palabras: excelente literatura.

jueves, 3 de abril de 2008



zacatecas

En Zacatecas hay dos estaciones la del tren y el invierno. Hace un frío de perros, pero bueno, la idea de ir a su festival no estaba nada mal. La visita de Bob Dylan al norteño estado, era todo un suceso. Llegaron mochileros de varios lares del país, para ver al compositor más influyente de la segunda mitad del siglo XX -aunque se enojen los beatlemaniacos-. Según los datos oficiales fueron cerca de doce mil las personas que asistieron a un concierto, que parece ser, fue el más largo que el músico dio en México. Dylan tocó clásicos en sus versiones tipo bluegrass, "Masters of war", "I'ill be your baby tonigth", "All along the watch tower" y por supuesto "Like Rolling Stone". A nivel musical no hay queja sigue tocando como los grandes. No obstante me descolocó saber que ahora es un divo. Su exigencias en materia de seguridad fueron en exceso, pedir trescientos policias es demasiado, sólo Bush y eso con razón porque tiene tal cantidad de enemigos, que bueno al menos de un sape no se salva. ¿Pero Dylan? Exagerdo creo. O ¿por qué cobró 360 mil dólares por el concierto en Zacatecas, cuando en todos lados tuvo una tarifa de 160 mil. Quiza supuso que como este es uno de los estados con más alto nivel de exportación de braseros, pensó que la ciudad tendría millones de dólares. En serio, mal, ¿dónde quedó el espíritu en aventurero y revolucionario, sólo es materia de conciones? Con todo y todo es un master. Ni pex.